miércoles, 27 de abril de 2011

Benerva (tiamina)

La vitamina B1, o tiamina , pertenece al complejo de la vitamina B. Fue la primera descubierta en 1911 , por lo que a veces se nombra sencillamente como vitamina B.

Las vitaminas son compuestos orgánicos necesarios para la realización del metabolismo normal de ciertos organismos vivos, asemejándose a las enzimas u hormonas, que el organismo necesita en cantidades relativamente mínimas para su normal crecimiento y desarrollo.

En condiciones normales, es decir, en la planta completa, la Tiamina (B1, en la imagen anterior)se sintetiza en las hojas y se traslada a las raíces. En solución de cultivo, se aceleraba el crecimiento de las raíces añadiéndoles Biotina y Tiamina (B1); sin embargo, hoy se sabe que la Biotina se sintetiza en las raíces, por lo cual el aporte simplemente de tiamina ya acelera por sí mismo el crecimiento de éstas.

La Tiamina es un agente estimulante del crecimiento de las yemas de las plantas, comportándose de forma similar a las auxinas (que son hormonas), es decir, provocan la brotación.

Las auxinas son un grupo de fitohormonas que funcionan como reguladoras del crecimiento vegetal. Esencialmente provocan la elongación de las células. Se sintetizan en las regiones meristemáticas del ápice de los tallos y se desplazan desde allí hacia otras zonas de la planta, principalmente hacia la base.

La comercialización  que considero más útil de la tiamina es Benerva, en ampollas de 1 ml., que contiene como principio activo tiamina (100 mg.). Yo la aplico sobre todo tras un trasplante, o si veo que en una zona determinada ciertas ramas de un bonsai brotan con menos fuerza que en el resto, y puede necesitar ayuda para crear raíces.

La aplico en la dosis de una ampolla por litro y medio de agua de riego, en tierra. La última vez que la adquirí, este invierno, me costó menos de 2 euros creo recordar (6 ampollas) así que, realmente, no es una alta inversión.

Siempre se puede pensar que podría ser que el árbol hubiera evolucionado igual sin la adición de Benerva pero, al fin y al cabo, ésta es una idea que puede suponerse a todo lo que aplicamos a nuestros bonsais y, en principio, como hemos visto, la aplicación de tiamina a las raíces sí tiene una base científica.

miércoles, 13 de abril de 2011

¿Qué le pasa a mi arce?

En principio, con una situación, abonado y cuidados diarios apropiados, que se han descrito en otros apartados, el arce no tiene más problemas de cultivo que otras especies. Sin embargo, a menudo encontramos problemas, de los cuales observamos sólo los síntomas, y es importante reaccionar ante estos síntomas a tiempo, bien cambiando las circunstancias en que lo estamos cultivando o bien aplicando el tratamiento adecuado.

Veamos los síntomas y sus posibles (aunque no únicas, ahí habría que revisar la historia de cada árbol en particular) causas:

Cuando el arce presenta hojas de color amarronado, con los bordes secos, puede deberse a poco riego (o sustrato inadecuado que no permite que el agua llegue adecuadamente), o bien a un exceso de insolación. Por tanto deberemos revisar el sustrato, regarlo más a menudo, o bien ponerlo en una situación de semisombra, como hemos comentado en otros artículos que es más acertado para la especie.



Si observamos que las hojas tienen un moteado amarillo, debemos contemplar la posibilidad de la existencia de araña roja. Posteriormente, las hojas se abarquillan, llegando incluso a secarse totalmente y caerse.
Estos arácnidos diminutos pueden verse si se observa con atención, o bien utilizando el truco de sacudir alguna rama sobre una hoja blanca de papel. Igualmente en ocasiones pueden observarse las diminutas telarañas que tejen en el envés de las hojas, pero el hecho de que no las veamos no quiere decir que no existan.
Como el ambiente cálido y seco favorece a la araña roja, la pulverización puede ser un paliativo.
Podemos mantener a raya a la araña roja con los tratamientos de invierno a base de aceites minerales, pero una vez que ya ha aparecido deberemos utilizar como remedio tratamientos específicos contra ella, como el Keltane u otros acaricidas como Azinfos, Binapacril, Carbofenotion, Dinocap, Fosalone, Metoato, etc. 

También existen remedios ecológicos contra la araña roja: Así, tiene sus depredadores naturales, pero no controlan la plaga totalmente. Amblyseius californicus come huevos, larvas y adultos de Ácaros. Existen a la venta preparados con estos depredadores para soltarlos dentro de invernaderos. Esto se está haciendo en explotaciones comerciales, pero a nivel de aficionado que tiene uno o varios árboles afectados no es una solución práctica.

Cuando el arce presenta brotes largos y débiles puede deberse a exceso de riego o falta de luz. A menudo sucede si se cultiva en interior, lo cual no es habitual (y desde luego nada aconsejable) en los bonsais. Es importante que estén al aire libre, en una situación adecuada según las pautas que hemos visto en otras ocasiones.

La existencia de pulgón es fácil de detectar, porque se ven bien a simple vista y los aficionados a bonsais "remiramos" mucho nuestros arbolitos, sobre todo en la época de brotación. El pulgón es un insecto a veces negro y otras verde, que se suele ver en el envés de las hojas y el tallo, a menudo en los brotes tiernos. El crecimiento del arce en el caso de sufrir esta plaga se observa además lánguido y retorcido. No se os ocurra echar cualquier remedio casero que haya servido para vuestras plantas de jardín o incluso para otros bonsais, como el agua jabonosa. Os lo digo por experiencia, las hojas del arce son demasiado delicadas y se queman con facilidad.
La presencia de hormigas cerca del arce puede ser igualmente un primer aviso para que busquemos el pulgón en nuestros árboles. Las hormigas "ordeñan" y pastorean los pulgones, incluso los trasladan a nuevos "pastos". Aunque el pulgón tiene depredadores naturales, como la mariquita o la avispa, su uso para el aficionado al bonsai no es un consejo muy realista. Deberemos utilizar un insecticida, como folithion.

Si encontramos en las hojas manchas marrones con aureola rojiza,  estaremos  alerta porque es probable la existencia de hongos, contra los cuales utilizaremos un fungicida sistémico. Este tipo de tratamiento (sistémico), a diferencia de los tratamientos de contacto, Son absorbidos a través de las hojas y de las raíces y se movilizan por toda la planta, y  afectan además a varias etapas de la vida del hongo.

Otro síntoma que podemos encontrar en los arces, sobre todo en los que tienen un hábito de crecimiento corto como el palmatum shishigashira, o un estilo más propicio para ello, como el escoba, es la muerte de hojas y ramas interiores, a las que no llega bien la luz. En este caso, realizaremos una poda de aclarado y le daremos unas horas de sol (a poder ser matutino) durante una temporada,  hasta su recuperación.

domingo, 10 de abril de 2011

Desde un arce del jardín

Este artículo de bonsai4me me pareció interesante. Lo he traducido de esta página.

"Este bonsai de arce palmatum inició su andadura con un acodo aéreo de uno de mi jardín. En el momento en que se tomó esta foto el tronco tenía centímetro y medio de diámetro.
El plantón resultante se trasplantó solo, sobre una baldosa, para asegurar un cepellón plano y un buen nebari (raíces superficiales).
Así, se dejó crecer libremente en el suelo durante 4-5 años para que el tronco engrosara.







La imagen de la izquierda muestra el árbol sólo 3 años más tarde, durante el verano de 2005.  Se dejó crecer libremente todas las temporadas de cultivo, para estimular el rápido engrosamiento del tronco, podándolo cada otoño para que el resultado del tronco fuera adecuado.












Una imagen de cerca  durante el verano de  2006. Varios brotes que han surgido se dejaron crecer, para el diseño final:  mientras que algunos de ellos servirían para propiciar el engrosamiento del tronco, otros sí formarían parte del diseño final del árbol.










En otoño de 2007 el árbol se  sacó finalmente de la tierra, realizándole una poda severa para reconstruir el diseño de la totalidad de las ramas. El árbol se trasplantó primero en una maceta de entrenamiento negra de gran tamaño para, finalmente, trasplantarse a maceta de bonsai a principios de 2009.













Las nuevas ramas se han desarrollado en las últimas cuatro temporadas. Cada año se permitió crecer libremente a las nuevas brotaciones, para ser podadas y alambradas cada otoño, dándoles así forma. De esta forma se asegura su adecuada conicidad.
Se seleccionaron cada año los brotes con internudos cortos, para fomentar la máxima ramificacion en el mínimo espacio.






 La apariencia del nebari ha seguido siendo mejorada desde que se trasplantó a maceta de bonsai. La imagen de la izquierda lo muestra en 2007, justo después de que se realizara un injerto en la base para llenar un vacío de raíces existente en el nebari.

La siguiente imagen muestra el nebari en diciembre de 2010, con el injerto ya consolidado en su posicion. Se ha realizado un total de 5 injertos en la base de este bonsai para lograr su nebari actual.







Una imagen del tronco y la estructura de las ramas. El color verde de la corteza inmadura del acer palmatum puede tardar más de diez años en desaparecer, por lo cual se desgastó suavemente la corteza verde dos veces al año con lija, fomentando así la aparición de la corteza madura.








El resultado final es este bonsai de arce palmatum de 55 cm. de altura  y diámetro del tronco por encima de la base de 6 cm, con una superficie de nebari de 25 cm."


Traducido de: 


lunes, 4 de abril de 2011

La poda del arce. Particularidades.

Durante el invierno, cuando el arce todavía está durmiendo, se puede realizar sin peligro una poda selectiva de ramas.

Hay dos razones principales para podar durante este período: que se puede ver con toda claridad la completa estructura de las ramas;  y que el árbol sangrará mucho menos, puesto que se encuentra en su fase de reposo.

Después de un año de crecimiento, el arce habrá producido una gran cantidad de ramas nuevas. Es posible que, además de las nuevas ramas secundarias nacidas en las principales que dejamos el año anterior, hayan brotado otras ramas directamente desde el tronco.

Si estas ramas sirven para rellenar un espacio excesivamente abierto, se conservarán. En caso contrario se podarán a ras del tronco y se sellará el tronco con una buena pasta selladora.
Cuando acortamos una rama de las ya existentes, hay que tener la prudencia  de dejar un trocito de muñón por encima del último brote que conservemos, ya que el arce tiende a secar ramas cerca de las heridas. De esta manera, aseguraremos la conservación de los brotes elegidos, aunque seque algo la rama podada.



La herramienta correcta a utilizar es la podadora cóncava o kuikiri.




Si se poda una rama gruesa durante el período de crecimiento, puede que la aplicación de la pasta selladora no sea capaz de detener la pérdida de savia. Si es sólo una rama importante la que se ha podado fuera de la estación correcta, probablemente el árbol no morirá, pero es posible que una parte de él se seque. Y, por supuesto, si son varias ramas importantes las que se podan fuera de época, se correría el riesgo serio de perder el arce por completo.

Por lo tanto, es muy recomendable realizar la poda de ramas dentro del invierno, tanto de los palmatum como de los buergerianum, aunque estos últimos son muy fuertes y tienen muchas más posibilidades de sobrevivir.

Mediante la poda de las ramas es posible conseguir una copa con ramas muy delicadas, sin tener que utilizar alambre para controlar la dirección de las mismas.
Las yemas de los arces aparecen en parejas, una a cada lado de la rama. Mediante la selección de yemas y la poda apropiada de ramas, la nueva brotación seguirá la dirección que apunta la yema elegida.
La nueva brotación no debe dirigirse ni hacia arriba ni habia abajo, sino en un plano horizontal, bien hacia la izquierda o hacia la derecha, según dicte la formación estructural de la rama en cuestión.
En un buen plano controlado por la dirección de la rama principal, las ramas secundarias y terciarias no deben cruzarse, sino formar una recta y completa red horizontal.
Tendremos siempre en cuenta que las ramas altas serán más cortas y tendrán más densidad de yemas que las ramas más bajas. Esta densidad de yemas se consigue mediante una poda más concentrada, dejando menos distancia entre cada par de yemas, con una poda o pinzado más frecuente que en la parte baja del árbol.

domingo, 3 de abril de 2011

Exposición de bonsais de Cosmocaixa, 2 y 3 de abril

Organizada por la Asociación de Bonsai de Alcobendas,  con pocos pero muy conseguidos ejemplares, ha resultado una exposición que merecía la pena ver.
Solamente pude asistir hoy, con lo cual me perdí la demostración de formación de una sabina yamadori, cuyo trasplante se ha efectuado esta mañana, de la mano de Juan José Bueno, asistido por Miguel Ángel Pérez Caballero.
El trasplante, sencillo pero bien explicado, ha sido un rato agradable en el que Juanjo ha contestado con claridad y sencillez a nuestras preguntas.
La sabina, en estilo literati, se ha modelado con un resultado con bastante futuro. Pero evidentemente, han sido los arces el objetivo de mis miradas. Aunque reconozco que las posibilidades de modelado de las coníferas, han llegado hoy a tentarme... casi.
Hemos tenido en la exposición cuatro arces palmatum y un buergerianum.
Este bosque de diferentes variedades de palmatum, que ha sido el primer premio de la expo, resultaba espectacular por su colorido. Y probablemente lo resulte en todas las estaciones con hoja:


En fotografía pierde un poco, pues no se aprecia tanto contraste de color, ni la hoja tan pequeña que algunos de los ejemplares presentaban. El hábito de crecimiento del shishigashira (el arce verde) , más compacto, ofrecía otro punto de contraste que añadía aún más interés a la composición.

El segundo premio fue para este arce palmatum Orange Dream , propiedad de Luis Vallejo, con unas masas de follaje muy bien definidas.



Este arce de varios troncos es propiedad de Juan José Bueno. Buen ejemplar, pero quizá lo más llamativo es el kusamono, que no se aprecia bien, pero se encuentra plantado en una lata oxidada.




Este era el último bonsai de arce palmatum de la exposición, como véis todos los palmatum ya muy brotados, lo cual me llamó la atención pues algunos de los míos están comenzando ahora. Y también por el estado de la brotación del quinto arce de la exposición: este arce buergerianum.



Este ejemplar, propiedad de Carlos Lázaro, pertenece a la variedad nioi, de hoja más pequeña y crecimiento más compacto.

Una exposición que ha merecido la pena ver.
Agradecer a la Asociación de Alcobendas el esfuerzo realizado, y a Marcopolo  de http://www.portalbonsai.com haberme facilitado las fotografías, pues me fui sin cámara y tan ancha... cosas de bloggera novata ;)

Si tu arce seca ramas...

Los síntomas de la marchitez vascular causada por Verticillium sp. suelen quedar limitados a algunas ramas del bonsai. Difícilmente el árbol entero se ve afectado a no ser que se trate de un caso extremo.


Es frecuente ver una rama con apenas crecimiento, con las hojas completamente de formadas, quemadas por las puntas, y enanizadas. Todo ello se debe a una mala circulación de la savia, que impide el desarrollo normal empezando por la nueva brotación y terminando por las hojas más viejas.



En casos más graves el efecto puede desplazarse a toda la planta, pero no es lo común, de manera que observamos partes el árbol con un crecimiento normal incluso vigoroso y ramas enteras con las hojas exageradamente deformadas. Esta enfermedad es frecuente en los arces.

Característico anillo xilemático oscuro producido por el temible hongo Verticillium:



Contra este mal lo mejor es prevenir, antes que tener que curar: cualquier herida de poda importante tanto de ramas como de raíces hay que tratarla con pasta selladora (generalmente vienen con sustancias funguicidas incluidas), no reutilizar los sustratos y lavar muy bien las macetas de plantas infectadas, así como desinfectar las herramientas de poda.

Contra el verticillium instaurado: tratamiento con Beltanol.

Desde luego, que un arce seque alguna rama no es índice seguro de la existencia de este hongo, pero sí es una opción a tener en cuenta, puesto que la reacción temprana es importante en estos casos.

sábado, 2 de abril de 2011

Trasplante en arces

La finalidad del trasplante de los bonsais es doble:
Por una parte, la creación de un sistema radical fibroso y capilar para asegurar la vida del árbol en un espacio muy reducido durante largos años (como motivo prioritario)s y, por otra, la renovación periódica de su medio de vida, o sea, la tierra.
El trasplante se realiza en primavera, cuando las yemas engordan. Las fechas variarán de la zona geográfica, de la ubicación, de la especie (los buergerianum, en general, suelen hinchar yemas un par de semanas antes que los palmatum, por ejemplo) y del ejemplar en particular y su trayectoria vital anterior.
Para los arces jóvenes será necesario el trasplante anual, no así con los que ya lleven tiempo de entrenamiento como bonsai.
Sacaremos el árbol de su maceta, con mucho cuidado, la limpiaremos y desinfectaremos, aunque sólo sea con agua y jabón. La enjuagaremos después con abundante agua fría y la dejaremos secar.
La preparación de la mezcla de tierra es muy particular (lo hemos visto en otros posts del blog) y depende de la zona geográfica, la ubicación del árbol, de si está a pleno sol en verano (aunque recordemos que el arce no debe cultivarse a pleno sol en países cálidos, dado que las hojas se quemarán fácilmente). o de si el suministro de agua es controlado o el árbol está expuesto a la lluvia. En general, la mezcla de tierra deber ser porosa, pero a la vez tiene que tener la capacidad de retener la suficiente humedad. Actualmente, yo utilizo akadama y grava volcánica (al 50%), pero he de estar bastante pendiente del riego.
La mezcla, cualquiera que cada uno decida para sus arces bonsai, no debe encharcarse, para que las raíces no se pudran, por lo cual será interesante también utilizar tres capas de granulometrías diferentes, colocando la de mezcla más gruesa debajo.
Por lo general, los arces crecen bien en  cualquier tipo de suelo de estas características.
Si el prebonsai de arce ha sido correctamente cuidado durante el período de crecimiento anterior al trasplante, la poda de las raíces podrá efectuarse sin temor. Sin embargo, si no está lo suficientemente fuerte y se poda el cepellón demasiado, los nuevos brotes no se desarrollarán con fuerza, y puede que muchos se sequen.
Al sacar el árbol de la maceta observaremos que el cepellón tiene lo que se podría denominar un sistema de raíces estables y otro de raíces muy largas y de color más claro. Son éstas las raíces que han crecido y se han extendido alrededor del interior de la maceta en el año o en los años anteriores.
Lo primero que hay que hacer es peinar estas raíces largas y separarlas del resto del cepellón. Algunas de ellas serán gordas y se ocultarán dentro del mazo de raíces. Será necesario seguirlas y podarlas completamente, lo más cerca de la base del tronco que sea necesario.
Una vez eliminadas estas raíces gruesas, examinaremos la zona del cepellón situada inmediatamente debajo de la base del tronco, limpiando esta parte de tierra con un palillo de los de comida china o similar, o con los dedos si fuera preciso. Con la base del tronco a la vista, se podarán por completo las raíces que salgan directamente de ella. Esto facilitará la creación de un sistema horizontal de raíces, y de un buen nebari en la superficie.
Una vez finalizada la poda de raíces, devolveremos el árbol a su maceta. Es importante anclarlo firmemente con alambre pasado por los agujeros de drenaje o por unos que algunas macetas tienen a tal efecto de la maceta, para que no se mueva hasta que las nuevas raíces lo  anclen a la maceta.
 Lo colocaríamos así:

Vista la maceta desde detrás:



Colocaremos después en la maceta un montoncito de sustrato, acomodando bien sobre el el arce, cuidando de que no queden huecos sin sustrato en la base del árbol, para después asegurarlo firmemente a la maceta ligando los alambres de dos en dos.

Es aconsejable que el tiempo entre poda de raíces no exceda de los dos años, pues éstas se desarrollan tanto que un período más largo originaría un cepellón tan denso y duro, que la operación de poda de raíces resultaría muy difícil. Por otro lado, el tamaño de las hojas puede controlarse ajustando el suministro del abono, por lo que poner sustrato nuevo cada dos años no potencia el crecimiento excesivo del follaje y sí facilita la consecución de un cepellón de raíces finas.
Después de asegurar bien los alambres, iremos añadiendo sustrato hasta rellenar de sobra la maceta, pues después, con un palillo, procederemos a remover el sustrato para provocar que se vaya rellenando bien y asentándose.
Para ello introduciremos el palillo por la punta realizando un leve movimiento de muñeca y empujando el sustrato a rellenar los "huecos" así provocados. Es importante dedicar bastante tiempo a este proceso de palilleo, para que la maceta quede bien rellena y el árbol esté bien inmerso y seguro en el nuevo sustrato.
Para finalizar, aplastaremos el sustrato en su superficie ligeramente, ayudándonos de un pequeño bloque de madera si no tenemos herramienta para tal fin.
Después del trasplante regaremos profusamente el bonsai hasta que salga agua limpia por los agujeros de drenaje.
Por supuesto, no empezaremos a abonar un árbol recién trasplantado hasta que la brotación esté desarrollada. También hay que tener en cuenta que un árbol que acaba de sufrir una poda de raíces y un trasplante no está en la plenitud de sus fuerzas, por lo que, si hubiese una caída brusca de temperatura, por debajo de 1ºC, habría que proteger al arce. Esto significa que los meses entre febrero y mayo pueden ser problemáticos, y se requiere una vigilancia especial para salvar los peligros de las heladas.

viernes, 1 de abril de 2011

Acer palmatum. Subespecies, grupos y variedades.

En la actualidad hay tres subespecies de Acer Palmatum: palmatum, amoenun (momiji), y matsumurae(yama momiji).

Hay más de 250 variedades y cultivares de Acer Palmatum, divididos en siete grupos: amoenum, palmatum, matsumurae, linearilobum, dissectum, dwarf, y otros.


Las hojas del acer palmatum de la subespecie amoenum (momiji en japonés) miden de 7 a 10 cm., divididas en 7 lóbulos, y tienen el borde finamente dentado.


Las de los acer palmatum subespecie matsumurae (yama momiji)son más largas que las de la subespecie palmatum y están divididas de 7 a 9 lóbulos, con los bordes dentados de forma irregular.








Por su parte, las hojas de los acer palmatum de la subespecie palmatum miden de 3 a 6 cm., divididas de 5 a 7 lóbulos, y tienen un borde irregular doblemente aserrado.


Hay más de 250 variedades y cultivares de Acer palmatum divididos en 7 grupos:
Amoenum.
Palmatum.
Matsumurae.
Linearilobum.
Dissectum.
Dwarf.
Otros.

Grupo Amoenum:
- la variedad osakazuki, con hojas de color verde oscuro, con 7 lóbulos. Cuando son jóvenes son de color rosa-marrón, luego amarillo-marrón hasta llegar al verde durante el verano, y al llegar el otoño son de color naranja a carmín. Probablemente es uno de los más bellos cultivares de Acer palmatum en otoño.

Grupo Palmatum:
- la variedad aoyagi (ukon), que en japonés significa "coral verde" ("ao" = verde y "yagi" = coral), con hojas de color verde lima en verano y amarillas en otoño. Se le considera el compañero de color "verde" de la variedad sangokaku.

- la variedad arakawa, que en japonés significa "tronco rugoso", con las hojas amarillas en otoño y verdes el resto del año, con la corteza del tronco de textura rugosa y acorchada.

- la variedad atropurpureum (tanabata), con hojas de color rojo oscuro hasta el otoño, doblemente aserradas.

- la variedad chishio, que significa "sangre", con hojas de color carmín cuando brota en primavera, verde en verano y naranja-escarlata en otoño.

- la variedad deshojo, bastante conocida, con hojas de color rojo carmín en primavera que se transforman en verdes con un tono rojizo o bronce.

- la variedad kagiri nishiki (kagiri o roseo-marginatum) de hojas bastante pequeñas, de 5 a 7 lóbulos, de color verde con borde de color blanco o rosa variegado y aserrado de forma irregular.

- la variedad sango kaku o senkaki. Sangokaku significa "torre de coral" y tiene la corteza de los brotes jóvenes de color rojo brillante como el coral, con hojas de color verde claro, color rosa cuando brotan y naranja a rojo claro en otoño. En ocasiones se le confunde con la variedad corallinum, pero son variedades diferentes.

- la variedad seigai, con hojas de color rojo púrpura, rosa oscuro o bronce durante la primavera, verdes durante el verano y de tonos rojo fuego durante el otoño. En ocasiones se le confunde con la variedad seigen.

Grupo Matsumurae:
- variedad beni shi en: con hojas de color rojo rosado cuando brotan y luego cambian al púrpura y luego al verde, pasando por el amarillo. Al final del verano y comienzo del otoño las hojas toman color dorado con los bordes variegados en rosa.

Grupo Dissectum:
- la variedad disectum (matsukaze), con hojas de color verde de 7 lóbulos, que se tornan amarillas en otoño, con la silueta finamente dibujada y dividida.

- la variedad disectum atropurpureum o disectum ornatum (akai-washino-o),cuyas hojas aparecen primero de color rojo-marrón y luego verde-marrón claro, con la silueta finamente dibujada y dividida.

- la variedad disectum garnet, o simplemente garnet, con hojas de color rojo púrpura oscuro o rojo granate, y la silueta finamente dibujada y dividida.

Grupo Dwarf:

- la variedad seigen (foto izq.), con hojas de color carmesí en primavera, verdes en verano y amarillas en otoño.

- la variedad kashima, en la cual las hojas cuando brotan son de color verde amarillento con los bordes de color carmín o rosado, y luego en otoño se transforma en tonos amarillos.

jueves, 31 de marzo de 2011

Primeros pasos: Un prebonsai de arce con material de vivero

En la actualidad, en cualquier vivero puede encontrarse un arce joven con el que comenzar una colección de bonsai.
Lo idóneo es elegir un ejemplar de 20 a 30 cm. de altura, con una amplia estructura de ramas y, a ser posible, con alguna rama baja en el tercio inferior. Como con cualquier árbol, si lo observamos desde todos los ángulos veremos que un lado resulta particularmente más interesante que los demás. Así fijaremos el frente, que determinará el diseño de nuestro prebonsai.
Para lograr una buena combinación de frente y nebari (raíces superficiales), que dará estabilidad al conjunto, habrá que examinar el nacimiento de las raíces principales de la base del tronco. Para ello hay que limpiar la tierra que rodea al tronco y averiguar qué distribución de raíces presenta.

Un nacimiento adecuado constituiría tener raices principales a la misma altura radiando de la base del tronco. La distribución ideal sería aquellas en que naciesen a ambos lados del tronco, visto desde el frente elegido, pero no en una simetría perfecta, sino de forma natural, evitando una distribución geométrica de las raíces.
Con el frente, pues, ya definido, se procede a investigar la estructura del cepellón de raíces. Una planta joven de vivero no habrá recibido ningún tipo de entrenamiento, así que el cepellón estará totalmente desorganizado. Las raíces estarán enrolladas dentro de su maceta de plástico y habrá un número alto de raíces gruesas que no nos sirven.
Lo que tenemos que hacer es volver a construir de nuevo el cepellón para poder formar un sistema radical fino y fibroso, que además es la base para lograr una fina estructura de ramas. Con mucho cuidado se efectúa el peinado de las raíces para distribuir el cepellón de forma radial y en un plano horizontal. Si existe una cantidad apreciable de finas raíces que alimenten al árbol, pueden podarse hasta las dos terceras partes de su longitud total. Esta actividad se realiza cuando se aprecian signos de actividad en el árbol y las puntas de las hojas empiezan a emerger de ellas.
Si no hay muchas raíces finas, sino una serie de raíces gruesas, la operación de poda de raíces no puede ser tan completa. En este caso, solamente será posible efectuar una ligera poda de estas raíces gruesas. Para completar la estructuración de un nuevo cepellón serán necesarios varios años, podando cada año más raíces gruesas a medida que vayan apareciendo más raíces finas.
Para iniciar el modelado de la estructura aérea es indispensable poseer un diseño mental del aspecto más o menos final del árbol. Si no se está seguro del diseño que se quiere, lo más fácil es recurrir a los libros y foros de bonsai, al visionado de fotos, etc. y, una vez elegida la forma básica de modelado que nos gusta y que potencialmente puede adaptarse a la forma y ramas de nuestro árbol, realizar un dibujo y utilizarlo como guía durante esta fase inicial de poda de las ramas.
Antes de efectuar el primer corte, hay que tener en cuenta el estado de las raíces, y el corte que les hemos efectuado. Si el árbol no posee un cepellón de raíces denso y fino, no es conveniente realizar una poda fuerte de ramas. Así que, probablemente, no será posible más que una limpieza de aquellas ramas demasiado largas y de las que sobran, sin cambiar demasiado el aspecto general. El trabajo grueso de ramas tendrá que esperar al menos al siguiente año de entrenamiento.

Ahora bien, lo que se puede hacer al principio de este primer año es reducir la longitud general de todas las ramas elegidas como estructura base de nuestro diseño. Es importante considerar no solamente las ramas laterales del bonsai, sino también permitir la existencia de ramas en la parte posterior y anterior, pues son las que le dan una sensación de volumen, de profundidad. No deben salir directamente hacia atrás o hacia delante, sino hacerlo con cierta inclinación hacia la izquierda o hacia la derecha.

Finalmente el mismo árbol se inclinará levemente hacia delante.

He tratado en estas líneas de facilitar al nuevo aficionado a los bonsais unas pautas muy generales para iniciarse con un material barato y comenzar con unas tareas sencillas y sin complicaciones.

Estas pequeñas directrices no hacen un bonsai, pero permiten, con poco riesgo económico, avanzar en los conocimientos sobre el tema lo suficiente como para, en un futuro, aprender a cultivar y formar verdaderos bonsais.

miércoles, 30 de marzo de 2011

Probando un abonado diferente

Este año probaré el sistema de abonado de Miguel Ángel Serrano, un compañero bonsaísta y biólogo, que lo ha diseñado y lo aplica, se ve que con excelentes resultados (eso espero). Lo comercializa por internet, así que si a alguno os interesa puedo poneros en contacto.

Lo explico a continuación para quienes pueda interesaros, y así de paso yo lo tengo a mano ;)

Se trata de una gama de 3 productos:
-Abono orgánico sólido.
-Complejo de Aminoácidos.
-Abono PK. A base de Fosfito potásico.(Indicado para abonado de inicio de temporada y como abono de otoño).

ABONO ORGÁNICO SÓLIDO:
Basado en el estiercol de oveja, preparando de forma industrial un abono orgánico sólido.
Su formato pellet es en forma de bolitas de color oscuro de unos 5 mm. como ya está fermentado, no huele mal.
No se deshace de forma inmediata con el riego, por lo que no crea costra superficial, y libera los nutrientes de forma contínua y lenta, como debe ser en un orgánico de base. No es necesario retirarlo del sustrato en toda la temporada.
Se aplica a razón de unos 50- 70g. en primavera y unos 40-60g. en otoño. Esta dosis es para un arbol mediano en una maceta de unos 30cm.
De forma experimental se ha ensayado dosis bastante mayores y no se ha observado efectos adversos, a excepción del crecimiento excesivo de hojas.
Se puede aplicar formando una banda de varios centimetros de anchura por toda la periferia o bien distribuyéndolo por toda la superficie del sustrato, sin acercarse al tronco. Su tamaño, muy similar al de las partículas del sustrato, hace que pase bastante inadvertido.
Su N-P-K es: 3-3-1. Contiene además un suplemento de minerales, principalmente hierro y magnesio.
Aunque pueda parecer un abono "flojito en N", la forma en la que se presenta éste, al estar bien mineralizado (fermentado), es muy asimilable por las raices por lo que tras 10-15 días tras su aplicación ya se observan sus efectos en la brotación. Además es un abono muy equilibrado con igual contenido de N que de P.
Este abono suplementado con el Complejo de aminoácidos proporciona un óptimo desarrollo. Recordar al respecto, que un orgánico sólido está concebido como una fuente constante de los macroelementos N;P;K, y por su naturaleza orgánica tiene ademas de la función nutritiva, la de mejorar la capacidad de adsorción del complejo de cambio iónico, muy reducida en sustratos con grandes partículas como los que usamos en el cultivo de bonsai. Hay quien usa abonos líquidos inorgánicos para obtener fuertes crecimientos. En este tipo de abonos la fuente de N, se asimila de forma más rápida que con los orgánicos sólidos, pero tiene el inconveniente de que el medio se saliniza en exceso, y no se obtiene mejora en el complejo de cambio iónico. además de los riesgos de sobredosis.
El precio es muy bueno, por lo que puede resultar una alternativa interesante desde el punto de vista económico, a los tradicionales orgánicos japoneses como el bio-gold, o hanagokoro.
Por supuesto, partimos de la base que cumple perfectamente con su función nutritiva, presentando a sí mismo un buen comportamiento mecánico a efectos de la acción disgregadora del agua de riego.

COMPLEJO DE AMINOÁCIDOS.
Es un complejo que estimula y revitaliza las funciones fisiológicas de la planta en los momentos de mayor actividad vegetativa.
Tiene además una importante acción frente a situaciones de estrés y está indicado para tratamientos posttrasplante, en árboles convalecientes por estrés hídrico, por heladas, por ataque de patógenos, etc.
Aunque en su composición incorpora los macroelementos N,P,K, están en baja proporción, y aparecen no como elementos sueltos sino formando parte de las moléculas de los principios que lo constituyen, por lo que realmente no es un abono en sentido estricto, sino un complemento para el abono orgánico solido, que garantiza que no haya carencias en los periodos de mayor actividad.
Contiene los 19 aminoácidos libres que las plantas usan para la síntesis de todas sus proteinas, y en alta concentración. Esto lo diferencia de muchos productos existentes en el mercado que solo incorporan algunos de los aminoácidos y en proporción mucho menor, por lo que la acción debida a los aminoácidos no es ni mucho menos lo completa que en el producto que ofrezco.
Los otros componentes mayoritarios, también en gran proporción son los ácidos húmicos y fúlvicos, de efectos muy beneficiosos.
Contiene también vitaminas del grupo B,Oligoelementos quelatados: Fe,Cu Mg, Mn,B, Zn,Mo y fitohormonas.
El contenido total N, P, K, es en porcentaje: 4-2-2, siendo el nitrógeno 100% orgánico, pues es el N que contienen los aminoácidos libres.
Para dar una explicación fácil de los Aminoácidos, decir que son los eslabones que forman las cadenas de proteinas. La síntesis de éstos por las plantas supone un gran esfuerzo metabólico, por lo que su adición supone un ahorro energético grande, y la planta puede sintetizar facilmente todas las proteinas estructurales y metabólicas que necesita en todo momento.
Los abonos elaborados a base de sangre son ricos en aminoacidos ya que la sangre es muy rica en proteinas. Los japoneses desde tiempos remotos, sin conocimientos de bioquímica ya lo usaban por que experimentaron sus buenos efectos.
Los ácidos húmicos y fulvicos además de ser un aporte de materia orgánica mineralizada, tienen un efecto muy positivo en el sustrato, ya que aumenta su poder tamponante (capacidad de regular y mantener el ph), incrementan notablemente la capacidad de intercambio catiónico, con lo que se optimiza la absorción de nutrientes.
Sus efectos producen un incremento notable del desarrollo radicular.
Los minerales quelatados en proporción muy superior a la que incorpora cualquier abono tradicional evita cualquier carencia mineral, en especial la clorosis férrica.
Las fitohormonas y la vit. B1, también con acción hormonal, inducen una rápida respuesta de los procesos fisiológicos y previenen desequilibrios hormonales que se pueden producir por crecimientos desiguales que hacen que algunos órganos actuen como sumidero de hormonas, caso de yemas apicales con exceso de dominancia, etc.
La idea surge porque este complejo reúne de forma equilibrada, todos los principios que usan los viveristas profesionales. Aplicarlos por separado daría lugar a un calendario de aplicación complejo, además del elevado coste que supone adquirirlos por separado. Con este produzto se tienen homogeneizados todos los principios activos que necesitan nuestros árboles para un óptimo desarrollo. Se simplifica enormemente el calendario de aplicación y es muy asequible economicamente.
Los resultados son visibles a las pocas aplicaciones. Funciona extraordinariamente en árboles que han sufrido algún estrés. Por ejemplo resulta muy útil su aplicación foliar en árboles recuperados, a los cuales podemos nutrir vía foliar sin forzarlos a nivel radicular. Después de los trasplantes es muy recomendable su uso pues se produce una buena respuesta en la brotación, evitando el retraso que se observa en algunos árboles producido por un trasplante con trabajo fuerte en las raices.
El producto está diseñado para su uso tanto en aplicación foliar, como en el agua de riego. Lo ideal es aplicarlo mediante pulverización tanto en la copa, mojando bien las hojas por ambos lados como en el sustrato (que previamente debe estar humedecido)
La aplicación foliar es muy eficaz porque ofrece disponibilidad inmediata de los nutientes, por poner un símil, equiparable a la administración de un fármaco vía intravenosa.
La aplicación en agua de riego también es necesaria, porque provee a la planta de reservas de los distintos compuestos en el sustrato. Como comentaba anteriormente, en el caso de los ácidos húmicos y fúlvicos su actividad más notoria se basa en la mejora de la capacidad de adsorción de los cationes en el complejo de cambio iónico, por eso es necesaria también la aplicación sobre el sustrato.
Calendario:
El producto hay que empezar a aplicarlo cuando se aprecia que la brotación es generalizada en el árbol.Se hace una aplicación cada 15 días. En Julio y Agosto puede valer con una sola aplicación y se retoma a últimos de agosto, hasta noviembre.
Estas fechas son orientativas y según el clima de la zona y las condiciones de la planta, hay que adaptarlo. El criterio válido es el de aplicarlo cuando la planta esté en plena actividad y no hacerlo cuando por algún motivo, estacional o fisiológico, la planta está en parada vegetativa. En estos casos la aplicación del producto forzaría una actividad que la planta de forma natural ha inhibido.
La aplicación foliar, sobre todo en caducifolios, sólo se hace cuando la hoja está madura, abril o mayo, según especies. Pero puede aplicarse perfectamente en agua de riego.
La máxima absorción foliar se produce a primeras horas de la mañana, El día que toque aplicación foliar, hay que madrugar. Lo idóneo hacerla al amanecer.
(Aunque se salga del tema, por el mismo motivo los productos fitosanitarios deben aplicarse por la noche, cuando la absorción foliar es menor y así minimizamos las posibles toxicidades.)
Realizar un buen abonado preotoñal es importante, ya que se crean reservas que permiten no tener que abonar tempranamente a la próxima primavera, y esto es recomendable para evitar tener que abonar árboles recien trasplantados, árboles de flor (el abonado rico en nitrogeno, inhibe la floración) y además se evita un crecimiento excesivo de las hojas.
En referencia a la forma de aplicar el producto, es muy útil usar un pulverizador de presión. En la aplicación foliar se moja bien todo el follaje tanto por el haz como por el envés de la hoja. En el caso de la aplicación sobre el sustrato, Éste debe estar algo humedecido previamente, con el pulverizador de presión se rocia bien toda la superficie hasta que se observa que el sustrato queda completamente empapado. Si lo aplicamos con una regadera, el producto drena demasiado rápido, y el sustrato no se empapa de forma tan eficaz y homogénea como si usamos el pulverizador de presión.

La dosificación del producto ya está adecuada para su uso en bonsai.
5cc.= 5ml/ 1 litro de agua (se puede dosificar midiendo 5 cm. con una jeringuilla de plástico) y añadiéndolos a 1l. de agua.
Con estos datos, echando cálculos, con 1 litro de producto se obtienen unos 200 litros de abono preparado para uso directo, que es cantidad suficiente para abonar unos 50 bonsais de tamaño medio durante toda la temporada.
Si se optimiza bien la aplicación del producto, la cantidad óptima que se aplica es de 300-400 ml. de producto preparado por aplicación.
Conviene ajustarse a las dosis indicadas y frecuencia de uso para obtener los mejores resultados. Aunque se ha ensayado con dosis mucho mayores sin observar efectos adversos, conviene ajustarse a lo prescrito.
El producto una vez preparado para su uso tiene una coloración muy oscura, no hay que preocuparse si quedan manchas de producto sobre las hojas, macetas, o repisas, pues aunque se seque es muy soluble y con un poco de agua pulverizada desaparece cualquier resto de forma inmediata.


ABONO PK -FOSFITO POTÁSICO. (ABONO DE OTOÑO).
Tradicionalmente se ha usado el fosfato potásico como fuente de fósforo y potasio para la elaboración de abonos complejos N-P-K. Esta fuente de fósforo se obtiene directamente de yacimientos naturales. Decir en este sentido que la mayoría de abonos orgánicos, no lo son estrictamente, ya que si bien el N. es de origen orgánico, por ejemplo, N aportado en forma de guano, el principal aporte de fósforo y potasio, es de origen mineral (inorgánico). No hay orgánicos puros, pues tendrían una muy baja proporción de P y K, por lo que se suplementan con una fuente mineral como señalaba antes.
El fósforo (P), forma sales y es bastante estable en el suelo, por lo que la disponibilidad para la planta es limitada. Por ello se hace necesario adicionarlo en cualquier abono que sea equilibrado. No ocurre lo mismo con el potasio (K), que suele estar en cantidades suficientes sobre todo en suelos con partículas de naturaleza arcillosa.
Desde unos años acá, se está imponiendo el uso de fosfito potásico. Esta sal es la fuente del ión fosfito que presenta muchas ventajas respecto al ión fosfato usado tradicionalmente.
El ión fosfito es muy facilmente asimilable por la planta, tanto por vía foliar como radicular, además es sistémico, es decir que tiene en la savia, un sentido tanto ascendente como descendente, garantizando un aporte a todas las zonas. Esto es importante, por ejemplo, cuando tras un daño radicular se interrumpe temporal y parcialmente las funciones de absorción radicular (por ejemplo, una recuperación o trasplante drástico).
Está bien estudiado y contrastado la función del ión fosfito en las plantas y en resumen estos son los beneficiosos efectos que produce su aplicación.
.- Resulta un eficiente agente fungicida, debido a una doble acción. Por un lado es un fungicida en sentido estricto, con capacidad de anular el agente patógeno. Además potencia la síntesis de fitoalexinas que son las sustancias que constituyen las defensas naturales de las plantas ante la invasión de algún agente patógeno.
.- Es un magnífico suministro de los elememtos P y K, garantizando los aportes en todos los procesos vitales donde son necesarios. En este sentido decir que la facilidad de circulación del fosfito produce una eficaz distribución de los nutrientes a los que se asocia.
.- Es un agente antiestrés. Estimulando los procesos metabólicos que se activan frente a situaciones de estrés, causado tanto por causas patológicas, como nutricionales y ambientales. Por ejemplo ante un estrés hídrico la planta tiene una serie de respuestas para sobrevivir, estas respuestas son potenciadas por el ión fosfito.
.- Potencia la lignificación de los tejidos jóvenes, mediante la síntesis de compuestos como la suberina y lignina. Los tejidos jóvenes con estructura herbácea son bastante vulnerables tanto a ataques de patógenos como daños ambientales. Cuanto antes se produzca el proceso de lignificado (adquisición de la consistencia leñosa), se minimizan los riesgos de daños por estas causas.
.- También tiene un papel importante en la floración, ya que las yemas de flor se refuerzan y se produce una floración más persistente.
Uso, Aplicaciones, Dosificación y Calendario:
Para facilitar su uso he preparado el producto con presentación líquida, disuelto en una solución mineral que contiene hierro y oligoelementos minerales quelatados en cantidad superior a las proporciones de cualquier abono convencional, garantizando un aporte óptimo de los mismos.
El resultado es un abono de fosfito potásico enriquecido con quelatos minerales, con una composición N-P-K de 0-10-8.
Se aplica tanto vía foliar como en el agua de riego sobre el sustrato. La foliar produce una administración rápida del producto con disponibilidad inmediata. Y la del riego en sustrato ademas de ser absorbido genera reservas de nutrientes en el sustrato.
Dosificación: Los botes ya tienen una etiqueta con las instrucciones de uso, no obstante lo indico aquí. Se prepara a razón de 10ml. de producto diluidos en 1,5l. de agua.
Por ejemplo con un bote de 500ml. tenemos para preparar 75 litros de abono PK listo para su uso en riego. Cantidad suficiente para tratar 40-50 bonsais todo el año.
Calendario de uso:
Aunque de forma tradicional se ha usado el abono con P y K en la época otoñal, decir que no tiene porqué restringirse sólo a la misma. Por ejemplo se puede aplicar un poco antes de brotación primaveral y luego otra aplicación para mediados de mayo, cuando el árbol está en plena actividad. Este abono a la dosis prescrita es una buena fuente de P y k.
Es perfectamente compatible con el orgánico sólido que se usa de base, así como con otros abonos, como puede ser el complejo de aminoácidos que uso de forma regular durante todo el periodo de actividad.
A partir de mediados de octubre, aunque las fechas son orientativas y deben adpatarse a cada zona, se aplica cada 15 días hasta diciembre, unas 3- 4 aplicaciones en total. Se adelanta su aplicación cuanto más temprano sea la llegada del otoño. Por ejemplo la otoñada en León es más temprana que en Sevilla, por lo que se adelantará el tratamiento otoñal con el fosfito.
Otra cuestión importante es usar un pulverizador de presión, que nos servirá tanto para el uso foliar como para aplicarlo en riego sobre el sustrato, en este caso se pulveriza sobre el mismo estando previamente húmedo. Se hacen varias pulverizaciones hasta que queda completamente empapado. Si lo aplicáramos con regadera o similar, el producto drena muy rápido, es menos efectivo y se desperdicia más.

domingo, 27 de marzo de 2011

La aerodinámica de las semillas de arce, ejemplo de evolución convergente

Una investigación, realizada por investigadores de la Universidad de Wageningen en los Países Bajos y el Instituto Tecnológico de California (Caltech) desvela los detalles del secreto aerodinámico de estas llamativas semillas giratorias.

La investigación, dirigida por David Lentink de la citada universidad y Michael H. Dickinson del Caltech, ha revelado que, cuando giran, las semillas de arce generan un vórtice a modo de tornado que se asienta sobre el borde de ataque delantero de las semillas durante su lento descenso giratorio hacia el suelo. Este vórtice en el borde delantero hace bajar la presión atmosférica sobre la superficie superior de la semilla, succionando con eficacia el aire hacia arriba de manera que esta corriente ejerce una fuerza opuesta a la de la gravedad, tirando de la semilla hacia arriba. El vórtice duplica la capacidad de sustentación en el aire de las semillas, en comparación con las semillas no giratorias.

Este uso de un vórtice en el borde delantero para aumentar la sustentación es notablemente similar a la estrategia empleada por insectos, murciélagos, y colibríes cuando se valen de sus alas para mantenerse flotando de manera estática en un punto determinado del espacio. El hallazgo significa que vegetales y animales han convergido evolutivamente en una solución aerodinámica de la misma clase para mejorar la eficacia del vuelo.

La investigación podría contribuir al desarrollo de microhelicópteros, así como al de paracaídas giratorios, un concepto abordado por algunas agencias espaciales para alargar el tiempo de descenso de futuras sondas planetarias dedicadas a explorar las atmósferas de planetas como Marte.


Las semillas de arce podrían representar el más básico y simple diseño de un helicóptero en miniatura, si el ala giratoria pudiera ser impulsada por un micromotor", explica Lentink.

Hay un interés enorme en el desarrollo de vehículos aéreos diminutos que, dado su tamaño, deben funcionar usando los mismos principios físicos empleados por cuerpos voladores naturales tales como insectos y semillas de arce. Por ejemplo, Lockheed Martin intentó desarrollar minicámaras voladoras baratas al estilo de las semillas de arce, que pudieran ser desplegadas en grandes cantidades para la vigilancia, aunque el proyecto ya no está siendo financiado en estos momentos.

En los últimos cuatro años, Lentink, que es ingeniero aeroespacial, ha diseñado diminutos vehículos aéreos operativos, inspirados por sus investigaciones sobre el vuelo de insectos y pájaros.

Fuente: http://www.solociencia.com/biologia/09071603.htm

 La semilla en el arce palmatum  permanece en el árbol desde que sale hasta el otoño, en que se desprende.

sábado, 26 de marzo de 2011

Yatsubusa

El tipo Yatsubusa es muy apreciado como bonsai, puesto que tienen hoja más pequeña. Veamos por qué.

Con algunas excepciones, como la deformación genética en el núcleo de las semillas y malformaciones en el proceso de crecimiento, todas las semillas son semillas de árboles. Sin embargo, de algunas semillas se producen árboles enanos aunque sean de la misma especie. Estas semillas se derivan de una planta afectada por un tipo de hongo llamado el "Apiosporina collinsii", que atacan a la genética de la semilla. Este nuevo código genético será reproducido en la semilla.

Estos árboles modificados genéticamente rara vez producen semillas, por lo que son bastante raros. En Inglés, se refieren a ellas como "escoba de bruja" y "Yatsubusa" en japonés. Yatsubusa, es decir, ocho (8) yemas (se refiere al hábito de crecimiento muy compacto de estas variedades).

Por tanto, el método más sencillo para obtener una Yatsubusa es propagar con esquejes en lugar de semillas.

Hoja de Acer Palmatum Kiyohime Yatsubusa:



Acer Palmatum Yatsubusa:


miércoles, 23 de marzo de 2011

Herramientas básicas para el bonsaísta

1. Tijera de mango largo para ramitas pequeñas y hojas.
2. Podadora larga, para ramitas.
3. Podadora mariposa, para ramitas y raíces.
4. Pinza cortadora, principalmente para defoliado.
5 y 6. Vaciadoras cóncavas.
7 y 8. Kuikiris, podadoras de ramas, con corte cóncavo.
9. Cortaalambres.
10. Herramienta para jins.
11. Pinza.
12. Gancho para trasplante.
13. Cepillo para limpieza de tronco.
14. Escobilla.
15. Para doblar ramas.


Regaderas de bonsai, de agujero fino, para que el riego no mueva el sustrato.



Do sen, alambre de cobre, para realizar el alambrado, de diferentes diámetros.